jueves, 14 de octubre de 2010

Tus ojos, tus labios, tus manos

Estar contigo mientras tus ojos me miran, tus labios me besan y tus manos recorren mi cuerpo es la mejor sensación. La peor es la despedida, el verte marchar de espaldas haciéndote cada vez mas chico hasta que cruzas aquella esquina, o la puerta del ascensor se cierra impidiendo ver tu imperfección. En ese momento me siento sola como si me faltara algo, por eso te pido que me des un beso memorable, para que no pueda pensar en otra cosa hasta el viernes que viene para que cuando esté en la cama mire hacia el techo pensando en ese beso y luego empezar a soñar con lo mismo, para que cuando esté mirando el miércoles a los alumnos mientras estos escriben yo me quede embobada recordando ese momento tan mágico. Porque después de la despedida sólo me acompaña el sabor de tu boca en mis labios, el aroma de tu cuerpo en mi ropa y las marcas de tus mordiscos en mi cuello.

Pero tranquilo que aunque el sabor, el olor y las marcas de los mordiscos desaparezcan, tu recuerdo siempre, siempre, siempre estará en mi cabeza, en mi mente y en mi corazón hasta el día que te vuelva a ver, porque haces que me olvide de todo incluso de mi nombre, haces que vuelva a nacer, que cada día sea diferente.

Haces tantas cosas en mí sin que te des cuenta....

Te amo.

P.d. Gracias por darme la sorpresa de presentarte en el trabajo esta mañana. Miedo me da ir a trabajar con las cotillas de mis compañeras.

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